En Carrasco Norte, ST está finalizando una planta de
elaboración de alimentos de última generación.
La producción de alimentos, por su naturaleza, es extremadamente
dependiente de las condiciones de higiene y control de calidad, es por eso que
cuando trabajamos en este proyecto, nuestro equipo especializado aplicó los protocolos internacionales más exigentes.
El proyecto se desarrolla en un edificio principal de
3000 m2 construido con paneles herméticos, aislados térmicamente y con
terminación estéril, donde se desarrollan los diferentes espacios de
almacenamiento, de frío, de producción, de horneado, hasta la salida del
producto terminado en los docks de carga.
El hormigón premoldeado, asegura una
estructura y techo de gran solidez, dentro de la cual los isopaneles
conforman el espacio interior. Los pisos, son también un tema de cuidado, y se
realizaron con hormigón llaneado mecánicamente con endurecedores poliuretánicos
y con un moderno sistema sin juntas de retracción que permite hacer paños
enteros de 1000m2. Estos pisos son la vida de la planta, asegurando higiene,
resistencia a los químicos, lavabilidad, y durabilidad.
Por razones de higiene, el edificio de oficinas
técnicas y administrativas, se ubica fuera de la producción, en un volumen
separado, con una estética diferente pero armónica.
Todo el bagaje técnico de instalaciones eléctricas, de
ventilación, de aire comprimido, frío, y electrónica se aplica en un edificio
de producción de este tipo, para asegurar la máxima calidad del producto.
La
obra en este momento se encuentra en la etapa de montaje de la panelería
interna que conformará las diferentes áreas de la planta de elaboración.
Para
ésta se han utilizado practicamente un 90% de materiales prefabricados para la
estructura, los cerramientos exteriores y la tabiquería interior.
Su particularidad radica en el programa,
por las exigencias de limpieza y estanqueidad muy estrictas.
Al
ser una planta de elaboración de alimentos las condiciones internas de limpieza
son muy rigurosas y las superficies tienen que ser de fácil limpieza y
resistencia a los golpes propios de una actividad industrial.
Al
producirse alimentos hay que evitar de cualquier manera el ingreso de roedores
a la planta, por eso no hay casi aberturas al exterior y hay una gran cantidad
de infraestructura dedicada a la ventilación y extracción mecánica de aire.
Los flujos de ingreso de materia prima y salida de producto terminado tienen
que estar claramente definidos y controlados.